El martes han convocado una asamblea abierta en la gaditana plaza de España a las 11:00.
Los ex
trabajadores de Delphi reclamaron ayer el cobro de los pagos pendientes
por la formación que reciben con una concentración ante la sede de la
Delegación Provincial de Empleo. Allí, unos 300 ex empleados se
concentraron para recordar que la encargada de impartir esos cursos, la
Fundación Universidad-Empresa de la Universidad (Fueca), no recibe las
cantidades comprometidas y firmadas por la Junta de Andalucía desde hace
cinco meses. Por eso, después de abonar las mensualidades con fondos
propios, la Fundación ha decidido no seguir haciéndolo hasta tener el
reintegro por parte de la Consejería de Hacienda.
La concentración de los trabajadores tuvo lugar al día siguiente de haberse cumplido el plazo para recibir su asignación (el 5 de cada mes). En la protesta, organizada tras el encierro protagonizado el pasado miércoles por los miembros de los cuatro sindicatos, se pudo palpar el estado de tensión de los trabajadores. "Es penoso que yo tenga que llegar a casa y decirle a mi mujer que vaya a comer con los dos niños a casa de su madre", dijo uno de los afectados. "Mientras dejan a los enchufados, nosotros estamos sin cobrar", gritó otra persona. La fecha y el mes en que se produce esta suspensión de pagos también produce grandes inquietudes a los asistentes: "Algunos tenemos que pagar la hipoteca el día cinco", o "Este es el peor mes pues tenemos que pagar también las matrículas de los niños".
Antonio Montoro, portavoz de UGT en Delphi, explicó a sus compañeros la situación. "Lo que tengamos que hacer, lo haremos", pero, ante todo, "vamos a hacerlo bien porque siempre lo hemos hecho bien", señaló. "Tendremos tiempo de estar juntos estos días", durante los cuales van a concretar el plan de movilizaciones a seguir. En la reunión mantenida con el delegado de Empleo, Juan Bouza, éste constató que pese a estar ya todo fiscalizado, no se puede proceder al pago hasta que la Consejería de Hacienda tenga fondos para ello. Ante las llamadas de algunos asistentes para ir a presionar a Fueca, Montoro la defendió: "La UCA es sagrada, intocable. Vamos a luchar porque ellos cobren su dinero; cuándo cobren, nosotros seremos los primeros en cobrar" afirmó el sindicalista. "Nuestro primer objetivo es cobrar, y para ello tendremos que ir al que nos tiene que pagar". Pero el portavoz recordó que lo principal es "negociar y pelear por el empleo en el Bahía".
Joaquín Sánchez, portavoz de CGT, recordó que el vicepresidente del Parlamento andaluz y coordinador general de IU en Andalucía, Diego Valderas, se comprometió a velar por los intereses del colectivo, pero puntualizó que ya son 18 los meses sin cumplimiento de los acuerdos. Criticó la no creación de empleo, la no productividad de los terrenos, los nuevos EREs ocurridos en las empresas en las que entraron ex-Delphi, además de no haberse solucionado los problemas de los prejubilados y el resto de asuntos pendientes.
Se llamó también a la unidad del colectivo, tratando de ayudar a aquellos que tienen más problemas, y se avanzó la continuación del movimiento con una asamblea abierta convocada para el próximo martes a las 11:00 horas en la plaza de España. A continuación, los ex empleados de Delphi llevaron sus protestas a las sedes provinciales de PSOE, IU y PP. En ellas, bajo una fuerte calor, increparon al Gobierno bipartito en la Junta acerca de los 4.000 empleos prometidos tras el cierre de la multinacional, criticaron las políticas de recortes y pidieron al vicepresidente Valderas que "cumpla con sus promesas". El sentimiento del colectivo era, no obstante, el de llevar "cinco años de un lado para otro".
La concentración de los trabajadores tuvo lugar al día siguiente de haberse cumplido el plazo para recibir su asignación (el 5 de cada mes). En la protesta, organizada tras el encierro protagonizado el pasado miércoles por los miembros de los cuatro sindicatos, se pudo palpar el estado de tensión de los trabajadores. "Es penoso que yo tenga que llegar a casa y decirle a mi mujer que vaya a comer con los dos niños a casa de su madre", dijo uno de los afectados. "Mientras dejan a los enchufados, nosotros estamos sin cobrar", gritó otra persona. La fecha y el mes en que se produce esta suspensión de pagos también produce grandes inquietudes a los asistentes: "Algunos tenemos que pagar la hipoteca el día cinco", o "Este es el peor mes pues tenemos que pagar también las matrículas de los niños".
Antonio Montoro, portavoz de UGT en Delphi, explicó a sus compañeros la situación. "Lo que tengamos que hacer, lo haremos", pero, ante todo, "vamos a hacerlo bien porque siempre lo hemos hecho bien", señaló. "Tendremos tiempo de estar juntos estos días", durante los cuales van a concretar el plan de movilizaciones a seguir. En la reunión mantenida con el delegado de Empleo, Juan Bouza, éste constató que pese a estar ya todo fiscalizado, no se puede proceder al pago hasta que la Consejería de Hacienda tenga fondos para ello. Ante las llamadas de algunos asistentes para ir a presionar a Fueca, Montoro la defendió: "La UCA es sagrada, intocable. Vamos a luchar porque ellos cobren su dinero; cuándo cobren, nosotros seremos los primeros en cobrar" afirmó el sindicalista. "Nuestro primer objetivo es cobrar, y para ello tendremos que ir al que nos tiene que pagar". Pero el portavoz recordó que lo principal es "negociar y pelear por el empleo en el Bahía".
Joaquín Sánchez, portavoz de CGT, recordó que el vicepresidente del Parlamento andaluz y coordinador general de IU en Andalucía, Diego Valderas, se comprometió a velar por los intereses del colectivo, pero puntualizó que ya son 18 los meses sin cumplimiento de los acuerdos. Criticó la no creación de empleo, la no productividad de los terrenos, los nuevos EREs ocurridos en las empresas en las que entraron ex-Delphi, además de no haberse solucionado los problemas de los prejubilados y el resto de asuntos pendientes.
Se llamó también a la unidad del colectivo, tratando de ayudar a aquellos que tienen más problemas, y se avanzó la continuación del movimiento con una asamblea abierta convocada para el próximo martes a las 11:00 horas en la plaza de España. A continuación, los ex empleados de Delphi llevaron sus protestas a las sedes provinciales de PSOE, IU y PP. En ellas, bajo una fuerte calor, increparon al Gobierno bipartito en la Junta acerca de los 4.000 empleos prometidos tras el cierre de la multinacional, criticaron las políticas de recortes y pidieron al vicepresidente Valderas que "cumpla con sus promesas". El sentimiento del colectivo era, no obstante, el de llevar "cinco años de un lado para otro".